Las velas mágicas superan en todos los aspectos a las velas tradicionales, que compramos en el supermercado. La elaboración de tus propias velas mágicas es extremadamente sencilla, son duraderas y brillantes como ninguna, aportando un toque íntimo y místico a tu hogar. ¡Os animo a que leáis este artículo y probéis a hacer las vuestras, seguro que os encanta!.
Velas mágicas
¿Y por qué se llaman “mágicas”?. Porque su elaboración, así como el toque decorativo final y el rendimiento de las velas en sí, tienen en común un toque de magia. Son muy fáciles de elaborar y no necesitan materiales difíciles de hallar (como los que aparecen en los programas de bricolaje en la TV).
Cabe destacar que su magia reside en el hecho de que si se vuelcan, la llama se extingue de manera inmediata gracias a dos elementos clave que mencionaremos más adelante.
Lo mejor de todo es que la mayoría de los materiales seguramente los tienes en casa, ¡y lo único que debes hacer es correr a tu cocina y buscarlos!
¿Qué necesitas para elaborar tus velas mágicas?
Para una sola vela, deberás tener a la mano:
- Un envase de cristal o vidrio. Servirán los de los productos que compraste en el mercado el mes pasado.
- Mechas flotantes. No pueden ser de otro tipo, ya que estos absorben todo tipo de aceite con facilidad.
- Agua.
- Aceite vegetal. Cualquier tipo servirá si tienes las mechas flotantes. Con una cucharada tendrás vela para dos horas.
- Para decorar: cualquier cosa que sea de tu gusto. Te podemos recomendar plantas, flores y frutas naturales, pero deberás comenzar todo el proceso de nuevo cada vez que se marchiten o se pudran, así que sería mejor que utilizaras todo en material sintético, de modo que sólo tengas que cambiar el agua, el aceite y la mecha una vez que esta se agote.
- Las piñas, las piedras y cualquier otro elemento que consideres decorativo y que no se pudra con facilidad, también son una excelente opción.
- Si quieres, también puedes darle olor a tu vela con aceites esenciales y hierbas o especias aromáticas.
Pasos a seguir:
- Limpia bien el recipiente donde harás la vela, y si tiene alguna etiqueta, quítasela bien para que no haga ruido visual con la decoración de tu vela, ya que es anti-estético.
- Rellena el recipiente con los objetos que escogiste para decorar. Llénalo con agua hasta unos 2 centímetros por debajo del borde.
- Vierte el aceite vegetal hasta que se vea ¼ ’’ de grosor.
- Introduce la mecha exactamente en el medio del recipiente.
- Enciéndela, ¡y eso es todo!
Importante: Tened mucho cuidado al realizar los pasos de vertido del aceite y encendido de la vela. Revisad que todo esté bien y seguro, no queremos que se pueda prender nada que no sea la vela.
Dependiendo de cuántas velas quieras hacer, deberás tener más material a mano. No escatimes en material, verás lo maravillosas que son una vez que las tengas listas, y querrás tenerlas por toda la casa, decorándolas de miles de formas.
Ilumina tu hogar de una manera más íntima con estas velas mágicas, seguras y muy económicas :)
